Subida a la Mola

 

Jose Carol, del Centro de Parálisis Cerebral Ciutat de Terrassa de Prodis, suben a la Mola con silla todo terreno y el apoyo de 60 voluntarios.

La Joëlette es una silla de ruedas todo terreno que permite hacer recorridos no adaptados a personas con movilidad reducida.

El domingo 5 de junio,  Jose y Carol pudieron cumplir uno de sus sueños: hicieron la cima de la Mola, del parque natural de Sant Llorenç del Munt. En una jornada matinal al igual que la de muchas personas que aprovechan el buen tiempo para hacer una excursión a la montaña, Jose y Carol lo hicieron por primera vez, gracias a los 60 voluntarios que les acompañaron para empujar la Joëlette, una silla de ruedas todo terreno .

Ya que la tarea principal de Prodis es la promoción integral de personas adultas con diversidad funcional, y va más allá del hecho puramente asistencial, se organizó esta excursión por el entorno natural de los alrededores de la ciudad. El resultado fue una experiencia inolvidable tanto para los dos protagonistas como para los acompañantes que hicieron de incansable motor durante todo el recorrido de subida y de bajada.

Desde Prodis se hizo una demanda de voluntarios en sus redes sociales, con más de 4.000 seguidores, y en poco más de una semana se alcanzó el número de 30 personas que inicialmente eran las previstas para empujar las sillas por los caminos y senderos del parque natural.

Para la excursión, fue necesario servirse de dos sillas de ruedas todo terreno, Joëlettes, que permiten afrontar terrenos de todo tipo a cualquier persona con movilidad reducida, con la ayuda de acompañantes. Estas sillas fueron sedidas a Prodis desde AVAN (Amigos de la Neurología). La silla consta de un asiento, que descansa sobre una rueda y cuatro brazos para ser conducida por dos pilotos. La Joëlette está equipada con patas de apoyo para las paradas, cintas de seguridad, frenos de disco, reposacabezas y almohadas.

Es apta para la práctica del senderismo y se recomienda que sean 3 o 4 personas las que acompañen la silla: dos para pilotarla y, el resto, para ofrecer relevos. En la salida de Prodis, que dispuso de la colaboración de Enric Datzira, responsable de equipamiento y proyectos de la Casa Nova de l’Obac, fueron una treintena de personas haciendo los relieves, las necesarias para poder alcanzar los 1.104 metros de altura de la Mola.

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