El proyecto El Vapor de Prodis es una iniciativa ambiciosa y transformadora que busca crear un espacio inclusivo y abierto a la comunidad, donde las personas con discapacidad intelectual, trastorno mental, parálisis cerebral y TEA puedan desarrollar sus capacidades y formar parte activa de la sociedad. Situado en un antiguo vapor textil de Terrassa, El Vapor ha sido restaurado para ofrecer una gran variedad de espacios y servicios que combinan la atención asistencial con la formación, el trabajo y el ocio, con la finalidad de promover la inclusión social y laboral.
Este proyecto nace de la necesidad de ofrecer un entorno adaptado que supere el modelo tradicional de institucionalización y que permita a las personas con discapacidad desarrollar su autonomía, interactuar con la comunidad y acceder a nuevas oportunidades de empleo. Con El Vapor hemos materializado lo que era nuestro sueño cuando, en 2020, iniciamos el diseño de este gran proyecto: crear un centro ocupacional que rompiese con cualquier idea previa de centro ocupacional. Unir en un solo espacio abierto estos servicios con un restaurante-escuela, un espacio de arte, espacios para actividades culturales y formativas, una cafetería… y todo esto, en un entorno atractivo, amable, confortable y plenamente accesible. Todos estos servicios se ponen a disposición tanto de las personas usuarias como de la comunidad local, fomentando una convivencia inclusiva, naturalizando la presencia y la participación de la ciudadanía y la interacción en el día a día de PRODIS.
La motivación detrás de esta iniciativa es clara: transformar el modelo de atención y apoyo a las personas con discapacidad intelectual, trastorno mental, parálisis cerebral y TEA, fomentando un entorno abierto donde puedan interactuar de manera activa con el resto de la comunidad y participar plenamente en actividades sociales, laborales y culturales. El proyecto quiere contribuir a la desinstitucionalización, un concepto clave para nuestra misión, que consiste en crear espacios donde las personas con necesidades especiales puedan vivir y desarrollarse de manera plena e integrada como parte activa en la sociedad.
Además de mejorar la calidad de vida de las personas atendidas, El Vapor tiene un gran impacto en la sensibilización de la sociedad, con actividades abiertas al público, trabajamos para cambiar la percepción de las discapacidades permitiendo a la comunidad conocer de cerca el potencial de las personas que forman parte de PRODIS, ayudando a romper prejuicios y fomentando una sociedad más comprensiva e inclusiva. Este gran proyecto ha sido posible gracias a la colaboración de muchos agentes públicos y privados que, compartiendo nuestra visión y confiando en que esta transformación es posible, han apoyado financiando parte del proyecto. Entre estos colaboradores se encuentran las más de 400 socias particulares, la Fundación ONCE, la Fundación La Caixa, la Fundación Manuel Lao, el Ayuntamiento de Terrassa, la Diputación de Barcelona, la Generalitat de Catalunya, además de muchos agentes locales privados que han colaborado para hacer frente a este reto.
En términos de proyección, El Vapor de Prodis no solo aspira a consolidarse como un referente local de inclusión e innovación social, sino que también busca servir como modelo replicable para otras comunidades e instituciones. A través de la colaboración con empresas locales, entidades sociales e instituciones públicas, El Vapor ha establecido una red sólida que potencia las oportunidades laborales y formativas de las personas con discapacidad, asegurando su inserción en el mundo laboral en ocupaciones de valor que mejoran su autoestima y calidad de vida.
Con el tiempo, el proyecto continuará creciendo y evolucionando, ofreciendo nuevas vías para la integración social y económica de las personas con discapacidad, y contribuyendo a crear una comunidad donde la diversidad sea vista como un valor y no como un obstáculo. El Vapor de Prodis no solo representa un gran avance en la atención y el apoyo a las personas con discapacidad, sino que también es un motor de cambio para la ciudad de Terrassa, convirtiéndose en un espacio de encuentro inclusivo abierto a todos.